Heredé la niebla y la risa, y me sorprendí una tarde larga de domingo devorándomelas lentamente con lujuría. Heredé también petirrojos enjaulados, acentos argentinos, susurros sigilosos e indolentes. Y caricias álgidas de putas desdentadas que se restriegan, rencorosas, en los ángulos esquivos de mi memoria. Heredé piratas y desaires. Muertos sonrientes y lunas insípidas. Suicidios reciclados. Fusas difusas rasgando la noche espesa. Versos perversos sangrándose en lo absurdo. Trastabillados trabalenguas áridos.
Heredé celuloides marchitados por los besos. Frases violadas quejándose con desgana en los salones del infierno. Antropófagos de rumores masturbándose en el cielo. Polisindentones, asindentones, alteraciones. Y heredé anáforas. Con la pasión de los ignorantes. Y un dolor perfecto. Y un crujir obsceno de tinieblas en calma. Y un zahorí sin sombra deslizándose en el filo. Heredé bocas, párpados, ojos, manos, estómagos. Y un catálogo deshilachado de nubes derrotados.
Heredé arrabales dispersos de pisadas imprudentes. Misterios de rellano iluminados por la noche. Y ciénagas de vientos mutilados. Y almas en alquiler. Heredé cascadas de tinta, chimeneas impolutas, luciérnagas eléctricas aventadas por las manos mustias de un ladrón suplicante. Y la amargura escondida en ataúdes blancos. Y el amor. Y la rabia. Y el silencio.
Heredé la palabra.
¡Coño Javi, que bueno! ¿Pero que es ágidas?
By: sondemar on 23 noviembre 2007
at 8:34 am
Oye Javi, acabo de ver que te estás haciendo otra página…¿?
By: sondemar on 23 noviembre 2007
at 5:36 pm
¿Todas las palabras?
By: Niha on 24 noviembre 2007
at 8:45 pm
y la contundencia.
(muy muy bueno)
By: Carmen on 25 noviembre 2007
at 3:28 pm
Magnífico festival sensual de palabras y sonidos.
By: Moa on 26 noviembre 2007
at 8:57 am
Maravilloso!
By: Maite on 22 diciembre 2007
at 1:48 pm